Estudiar antes o despues de hacer ejercicio
Hacer ejercicio después de estudiar
He aquí una posible estrategia para potenciar la memoria: hacer ejercicio cuatro horas después de aprender algo. En un estudio publicado el 11 de julio de 2016 en la revista Current Biology, los investigadores descubrieron que el ejercicio después del aprendizaje puede mejorar la memoria de la nueva información, pero solo si se hace en una ventana de tiempo específica.
En el estudio, 72 sujetos aprendieron 90 asociaciones imagen-ubicación -vinculando mentalmente una imagen con la nueva información para mejorar el recuerdo- durante un período de 40 minutos. A continuación, se les asignó aleatoriamente a uno de los tres grupos: un grupo hizo ejercicio inmediatamente, el segundo lo hizo cuatro horas después y el tercero no hizo ejercicio. La rutina de ejercicios consistió en 35 minutos de entrenamiento por intervalos en una bicicleta de fitness a una intensidad de hasta el 80% de la frecuencia cardíaca máxima.
Al cabo de 48 horas, se comprobó la memoria de los participantes mientras se escaneaba su cerebro mediante una resonancia magnética. Los que hicieron ejercicio cuatro horas después de la sesión de aprendizaje retuvieron la información mejor que los otros dos grupos. La resonancia magnética también mostró que el hipocampo, la región del cerebro relacionada con el aprendizaje y la memoria, estaba más activo cuando la información se recordaba correctamente.
Yoga antes o después de estudiar
He aquí una posible estrategia para potenciar la memoria: hacer ejercicio cuatro horas después de aprender algo. En un estudio publicado el 11 de julio de 2016 en la revista Current Biology, los investigadores descubrieron que el ejercicio después del aprendizaje puede mejorar la memoria de la nueva información, pero solo si se hace en una ventana de tiempo específica.
En el estudio, 72 sujetos aprendieron 90 asociaciones imagen-ubicación -vinculando mentalmente una imagen con la nueva información para mejorar el recuerdo- durante un período de 40 minutos. A continuación se les asignó aleatoriamente a uno de los tres grupos: un grupo hizo ejercicio inmediatamente, el segundo lo hizo cuatro horas más tarde y el tercero no hizo ejercicio. La rutina de ejercicios consistió en 35 minutos de entrenamiento por intervalos en una bicicleta de fitness a una intensidad de hasta el 80% de la frecuencia cardíaca máxima.
Al cabo de 48 horas, se comprobó la memoria de los participantes mientras se escaneaba su cerebro mediante una resonancia magnética. Los que hicieron ejercicio cuatro horas después de la sesión de aprendizaje retuvieron la información mejor que los otros dos grupos. La resonancia magnética también mostró que el hipocampo, la región del cerebro relacionada con el aprendizaje y la memoria, estaba más activo cuando la información se recordaba correctamente.
Cómo equilibrar el estudio y el ejercicio
Este artículo fue escrito por Nathan Fox, JD. Nathan Fox es un profesor del LSAT, el co-presentador del Thinking LSAT Podcast, y el co-fundador de LSATdemon. Nathan es el autor de seis libros sobre el LSAT, incluyendo The Fox LSAT Logical Reasoning Encyclopedia. Obtuvo una puntuación de 179 en el LSAT de febrero de 2007 y tiene un JD de la Universidad de California, Hastings College of the Law.
Estudiar y aprobar las clases puede ser difícil, y encontrar formas eficaces de estudiar puede parecer imposible. Estudios recientes han encontrado fuertes vínculos entre la función cognitiva, el recuerdo de la memoria y la función cerebral y el ejercicio, lo que apunta a los beneficios de añadir actividad física a tu rutina de estudio. Si buscas una forma de potenciar tus estudios, prueba a incorporar el ejercicio diario a tu rutina.
Este artículo ha sido redactado por Nathan Fox, JD. Nathan Fox es un profesor de LSAT, el co-presentador del Podcast Thinking LSAT, y el co-fundador de LSATdemon. Nathan es el autor de seis libros sobre el LSAT, incluyendo The Fox LSAT Logical Reasoning Encyclopedia. Obtuvo una puntuación de 179 en el LSAT de febrero de 2007 y tiene un JD de la Universidad de California, Hastings College of the Law. Este artículo ha sido visto 86.476 veces.
El mejor momento para hacer ejercicio cuando se estudia
Hace tiempo que se sabe y se ha demostrado que el ejercicio aumenta el rendimiento del cerebro. El aumento de la actividad física eleva el ritmo cardíaco y aumenta el flujo de sangre rica en oxígeno por todo el cuerpo, incluido el cerebro.
Se ha demostrado que el ejercicio de intensidad moderada está relacionado con un mayor rendimiento en la memoria de trabajo y la flexibilidad cognitiva, mientras que el ejercicio de alta intensidad mejora la velocidad de procesamiento de la información (Chang y Etnier, 2009).
Un estudio realizado por el Dartmouth College, publicado en la revista Neuroscience, demostró que, para aquellos que hacen ejercicio con regularidad, hacer ejercicio justo antes de realizar una tarea mental aumenta significativamente su rendimiento. Así que los ejercicios puntuales justo antes de los exámenes no funcionan.
Por supuesto, con nuestras apretadas agendas, puede ser difícil motivarse para ir al gimnasio una o varias veces a la semana. No necesitas otra guía sobre cómo hacer gimnasia correctamente (y tampoco creo que esté tan cualificada para dar esos consejos).