Aceite de palma estudios cientificos
Aceite de palma frente a aceite de coco
Coincidiendo con el auge del aceite de palma en el mercado mundial, el interés de la investigación ha crecido exponencialmente en las últimas tres décadas, con 1757 artículos de revistas revisadas por pares publicados solo en 2017 (Figura 1). Sin embargo, el análisis de los artículos publicados revela un claro desequilibrio en los tipos de investigación que se llevan a cabo: los temas de biocombustibles e ingeniería han dominado la literatura, mientras que los estudios que examinan el cambio de uso de la tierra, la biodiversidad y los aspectos socioeconómicos de la producción y el consumo están menos representados (Turner et al., 2008; Hansen et al., 2015).
El sesgo de publicación en la investigación sobre el aceite de palma refleja tendencias más amplias en el mundo académico conocidas como la mercantilización del conocimiento y la “universidad neoliberal” (Peters, 2013; Jones y Jones, 2017). La importancia comercial del aceite de palma ha impulsado los esfuerzos académicos hacia la optimización del proceso de producción, los estudios de viabilidad tecnológica y la comercialización del producto. Los temas relacionados con los biocombustibles han recibido una atención especial por parte de los investigadores que trabajan en los países productores de aceite de palma, especialmente después del año 2000 y tras el aumento constante de los precios del crudo (Hansen et al., 2015). Además, el enfoque en la comercialización del aceite de palma ha dirigido a los investigadores hacia un compromiso relativamente exclusivo con los actores industriales para abordar sus necesidades específicas de investigación (es decir, los propietarios de plantaciones y molinos, y las asociaciones de la industria). Así, el marco normativo de estas actividades de investigación y las vías de desarrollo que proponía estaban fuertemente sesgadas hacia una perspectiva empresarial y basadas en una evaluación disciplinaria y técnica de la situación actual. A pesar de que cada vez se reclama más la integración de una amplia gama de disciplinas y perspectivas de las partes interesadas en la investigación sobre la sostenibilidad (Hirsch Hadorn et al., 2008; Hospes et al., 2017), hasta la fecha estos enfoques siguen estando en gran medida ausentes en el sector del aceite de palma.
Aceite de palma aha
Durante siglos, los pueblos del continente africano, incluidos los antiguos egipcios, utilizaron el aceite de palma rojo (RPO) con fines culinarios. Sólo recientemente se ha introducido este aceite de palma mínimamente procesado en los paladares occidentales, con resultados variables. A algunas personas les parece poco apetecible el tono rojo-anaranjado, mientras que otras ven el color como un recordatorio bienvenido del alto contenido de caroteno del aceite. Al igual que otros aceites comestibles “exóticos”, como el de coco y el de aguacate, la OPR ha atraído a seguidores de culto por sus supuestos beneficios para la salud. La posibilidad de que la OPR pase de ser un aceite de nicho a ser un éxito comercial generalizado depende de que se confirmen estas afirmaciones sobre la salud y de la versatilidad del aceite para diversas aplicaciones alimentarias.
El CPO puede someterse a un refinado físico o químico, aunque el refinado físico es más común debido al alto contenido de AGL del CPO. Durante la etapa de desodorización del refinado físico, los aceites comestibles se someten a altas temperaturas (250-270º C) y bajas presiones (3-5 torr) para eliminar los AGF y los compuestos volátiles que afectan al olor y al sabor del aceite. La etapa de desodorización degrada térmicamente todos los carotenos, produciendo un aceite de color claro, y elimina algunos de los tocoferoles, tocotrienoles y fitoesteroles.
El aceite de palma obstruye las arterias
Antecedentes: Cada vez se acumulan más evidencias sobre los efectos beneficiosos del aceite de palma; sin embargo, todavía existen varias controversias relacionadas con sus efectos sobre los riesgos de enfermedad cardiovascular (ECV). Esta revisión explora los efectos del aceite de palma y de su fracción líquida, la oleína de palma, que se utiliza habitualmente como aceite de cocina, sobre cuatro parámetros lipídicos: el colesterol total (CT), los triglicéridos (TG), el colesterol de las lipoproteínas de alta densidad (HDL-C) y el colesterol de las lipoproteínas de baja densidad (LDL-C), que desempeñan un papel importante como biomarcadores relacionados con las ECV. Se realizó una revisión sistemática de la literatura para identificar los estudios relevantes sobre el aceite de palma y los parámetros lipídicos, centrándose específicamente en el modelo animal in vivo.
Métodos: Se realizó una búsqueda exhaustiva en Medline vía EBSCOhost, Medline vía OVID y Scopus. Los estudios se limitaron al idioma inglés publicados entre los años 2000 y 2019. Los principales criterios de inclusión fueron los siguientes: (1) Estudio con experimentos in vivo con animales [el animal debe limitarse a los mamíferos] (2) El estudio debe haber evaluado los efectos del aceite de palma o la oleína de palma en el parámetro de lípidos en plasma o suero (3) El estudio debe haber utilizado aceite de palma o oleína de palma en forma de aceite puro o refinado (4) El tratamiento del aceite de palma o la oleína de palma se evaluó utilizando los siguientes resultados: concentración plasmática o sérica de CT, TG, HDL-C y LDL-C (5) El estudio debía contar con un grupo de control y (6) se excluyeron los estudios sobre ácido graso específico, fracción enriquecida de tocotrienol y tocoferol, aceite de palma crudo, aceite de almendra, aceite de palma rojo, aceite de palma oxidado térmicamente, aceite de palma hidrogenado y productos a base de aceite de palma u oleína de palma, a saber, margarina, leche de palma, mantequilla y crema. La calidad y el riesgo de sesgo de los estudios seleccionados se evaluaron mediante las herramientas ARRIVE Guideline y SYRCLE’s Risk of Bias, respectivamente.
Aceite de palma y grasas saturadas
El aceite vegetal es una fuente importante de ácidos grasos, y como el aceite de palma es el aceite vegetal más consumido en muchos países, su alto contenido en ácidos grasos saturados ha generado muchas preocupaciones sobre la salud cardiometabólica. Los ácidos grasos de la dieta también se han relacionado con el metabolismo de la glucosa y la sensibilidad a la insulina. Esta revisión sistemática tiene como objetivo evaluar críticamente las pruebas disponibles sobre la asociación del aceite de palma con los biomarcadores del metabolismo de la glucosa en comparación con otros aceites vegetales.
Se realizaron búsquedas sistemáticas en PubMed, CENTRAL y Scopus hasta junio de 2018. Se buscaron estudios de intervención publicados sobre biomarcadores del metabolismo de la glucosa (definidos como glucosa en ayunas, insulina en ayunas, HOMA, glucosa posprandial de 2 horas y HbA1C) que compararan dietas ricas en aceite de palma o oleína de palma con otros aceites vegetales comestibles (como el aceite de oliva, el aceite de canola y el aceite de soja). Dos revisores extrajeron los datos de forma independiente y evaluaron los riesgos de sesgo de los estudios. Las diferencias medias de los resultados se agruparon para el metanálisis.